Por Alejandro Querejeta Barceló
He vivido por más de tres lustros en contacto, de una forma u otra, como muchos de los quiteños y visitantes de la ciudad, con la obra arquitectónica y escultórica de Milton Barragán, quien por estos días exhibe alrededor de un centenar de esculturas en la galería principal del Centro Cultural de la Pontificia Universidad Católica. Se trata de un recorrido por lo realizado desde 1968 hasta la actualidad. En el conjunto destacan obras de gran formato, que se ubican en el terreno de lo antológico de la escultura ecuatoriana, pero ante ellas no ceden terreno otras de tamaño más modesto, bien sean en madera o metal, con el color original de los materiales empleados, o pintadas para develar su realidad imaginaria o afectiva. Entre ellas hay varias que se muestran al público por primera vez.







