Por Daniel Márquez Soares
Foto: El Comercio
El 17 de diciembre de 1994, el ecuatoriano Segundo Mercado y el estadounidense Bernard Hopkins se midieron en Quito por el título de la Federación Internacional de Boxeo. Política, codicia, racismo y rencor matizaron el encuentro entre dos brillantes y dramáticos personajes que, aunque separados por el idioma y la geografía, tenían mucho en común. Uno saldría consagrado e iniciaría su camino a la grandeza. El otro se precipitaría al abismo de la pobreza y el olvido. Fue el día en que el Ecuador casi conquistó el campeonato mundial.
Para octubre de 1988 el ecuatoriano Segundo Mercado y el norteamericano Bernard Hopkins llevaban dos vidas diametralmente opuestas.