
Nunca hubo tanta comodidad para ver la televisión como en los años cincuenta, cuando se inventó el mando a distancia, un artilugio que en las manos de Samsung se precia de ser sostenible.
Controlar múltiples equipos electrónicos y electrodomésticos con un control remoto en la mano resulta una acción rutinaria, pero su historia se remonta siete décadas atrás, cuando el televidente tomó las riendas de uno de los medios primordiales de entretenimiento.
Zenith Electronics fue pionera en los años cincuenta, con el desarrollo de tres controles remotos. Eugene F. McDonald, fundador de la compañía (inicialmente Zenith Radio Corporation y desde 1999 una subsidiaria de LG Electronics), prefería la televisión sin las molestas interrupciones publicitarias y alentó la invención de un artefacto que permitiera evadir los anuncios.