EDICIÓN 486

El desempleo es una de las principales preocupaciones de los ecuatorianos. Los ahorros se acaban y las deudas crecen. Salimos de casa con la esperanza de que alguien más confíe en nosotros, pero eso, tan sencillo, parece imposible.
Johny tiene 33 años. Sale de su casa bien vestido, perfumado, con un pequeño portafolios bajo el brazo y la convicción de que este será un gran día. Agarra el bus en la esquina y se sienta del lado en que, según sus cálculos, no le va a pegar el sol, pero se equivoca y termina en el costado soleado. Todavía no aprende la maña, no está muy acostumbrado a andar en bus.