Edición 460 – septiembre 2020.
En esa calle de Quito, la Juan Rodríguez, las hojas aún se ponen doradas, recordándonos una estación inexistente en este país de la línea imaginaria: el otoño. Y recordándonos a quienes la habitaron… desde Kanela y Jaime Andrade Moscoso hasta la señora Di Capua. Ya era triste pasar por ahí y ver cerradas las puertas de La Galería, que, durante veinticuatro años, permitió a tanto artista emergente exponer su trabajo y a tanto espectador admirar su obra. Ahora solo quedan las hojas al viento y la nostalgia. Y, con la muerte de Betty Wappenstein (19 de julio de 2020), los recuerdos, que se hacen presentes al revisar su enorme legado.

Betty Deller de Wappenstein nació en 1940. Hija de migrantes, como tantas maravillosas personas de Quito que hicieron del país y de la ciudad su hogar y que quisieron hacer de él un mejor lugar para vivir. Casada con Ovidio Wappenstein, uno de los grandes arquitectos del país.