La exposición Arquitecturas precolombinas: representar y habitar el pasado, que muestra el Museo Casa del Alabado, ofrece una aproximación a las formas en que los pueblos originarios pensaron y representaron el hábitat de su época.

Se cree que la casa que alberga el Museo del Alabado es una de las más antiguas de Quito. En el dintel de piedra de la entrada principal se lee, en un español antiguo y un tanto confuso, la siguiente inscripción: “Alabado sea el santísimo sacramento. Acabose esta portada a 1 de julio de 1671 años”. Especialistas han dicho que probablemente ese año sea el de la terminación de la casa, y se presume que su construcción inicial data de finales del siglo XVI.
Elementos distintivos como el patio central, los cuartos alrededor en ambas plantas, las columnas de piedra y madera, las paredes de adobe, la balaustrada, los moriscos, determinan la tipología de las casas coloniales del Quito antiguo. En la ciudad existen catorce casas de ese tipo, según el estudio más reciente hecho por el Instituto Metropolitano de Patrimonio.