Este 11 de septiembre se cumplen cincuenta años del golpe militar que cambió radicalmente el destino de Chile y marcó para siempre a una generación de jóvenes que respaldaban a Salvador Allende. Este es el testimonio de uno de ellos: nuestro editor cultural.

La amenaza de golpe flotaba en el aire cuando llegué a Santiago a principios de marzo de 1973. Iba a continuar mis estudios de Sociología en la U de Chile, pero, sobre todo, quería vivir de cerca ese proceso político extraordinario que mantenía encandilada a la izquierda latinoamericana.
Y a la derecha también pues en plena Guerra Fría entre Washington y Moscú, insólitamente, una alianza de partidos marxistas, la Unidad Popular, había conquistado la presidencia en 1970. Pero muchas fuerzas se oponían a la llamada “vía democrática al socialismo”.