
Hace poco, Enrique Vásconez (Quito, 1960), escultor, diseñador y ceramista, expuso su más reciente trabajo en la galería N24. Con el título de Teratología, una serie de personajes de su particular mundo interior ha emergido de la cerámica de alta y baja temperatura.
Una especie de bestiario donde el mundo animal y vegetal hacen simbiosis, se entrelazan, se alimentan unos a otros: animales-ciudad, animales-planta, animales bicéfalos; edificios-carros conducidos por seres traídos de un mundo remoto, edificios tricéfalos, superficies agujereadas, son parte de sus más recientes piezas cerámicas.
“Teratología es un trabajo que sale de la reflexión de cómo se están interfiriendo las diferentes especies y espacios del planeta, en donde todos los fenómenos que conocemos de la cultura humana —sobrepoblación, sobreproducción, desarrollo vertiginoso— empiezan a llegar a todos los espacios del planeta; su huella se deja ver en los océanos, los animales se empiezan a adaptar a las ciudades”, dice el escultor.